Si recopiláramos el currículum de todos los componentes de Primal Fear, encontraríamos nombres tan representativos y influyentes de la escena metálica como Gamma Ray, Sinner, Magnum o Annihilator entre otros, con semejantes credenciales y la experiencia adquirida en su trayectoria como banda, es fácil suponer que este Unbreakable, décimo álbum de estudio de los alemanes, es un trallazo de autentico Heavy Metal, con un sonido muy contundente de batería a cargo de Randy Black que junto a Matt Sinner forma una fortísima base rítmica donde Magnus Karlsson y Alexander Beyrodt, últimos en llegar a la banda, intercambian labores guitarreras, y como guinda final la poderosa voz de Ralf Scheepers.
En cuanto a los temas, 13 en total, los alemanes vuelven a sus raíces mas metálicas en temas como "Give Em Hall", "Blaze of Glory" o "Conviction", con una estructura y sonido que les acerca nuevamente a Judas Priest y a los discos en solitario de Halford, con esos duelos a dos guitarras y con Ralf cantando en tonos altos y doblando voces, lo que los convierte en ejercicios de heavy metal clásico.
Para los seguidores de un estilo de metal mas aleman y con una mayor influencia de Gamma Ray, nos regalan "Strike" con un coro corto y pegadizo de los de levantar el puño y una base mas power metalera, con Ralf cantando mas melódico, en el mismo saco podríamos meter "And There Was Silence" que incluye otra colección de solos vertiginosos y una guitarra final que le da un toque himnico.
La militante "Bad Boys Wear Black", del que han grabado videoclip, vuelve a contar con un estribillo muy pegadizo y melódico, con el bajo de Sinner marcando el ritmo de la cancion y que encantara a los fans mas fieles.
En el apartado mas melódico "Metal Nation" que parece sacada directamente de su primer Lp con un sonido mas empastado de guitarras y la voz en primer plano, mientras el charles marca el tempo del tema.
Con tintes mas evolutivos dentro del sonido de la banda incluso coqueteando un poco con lo progresivo la extensa "Where Angels Die" introducida por las guitarras y que va subiendo en intensidad hasta llegar a convertirse en un poderoso medio tiempo en el que Ralf se lleva todo el protagonismo con una sentida interpretación, demostrando que no es un cantante limitado a gritar agudos.
"Born Again" es la balada donde un inspirado nuevamente Ralf, es acompañado por guitarras acústicas y eléctricas creando una bonita melodía adornada con arreglos de cuerda y teclado.
La divertida y festiva "Night Of The Jump" con sirena incluida cierra el disco con un toque hard-rockero , inluyendo unas melodías y coros que suenan muy frescos, dejando un muy buen sabor de boca.
Buen disco de los alemanes que lejos de repetirse disco tras disco miran de ir innovando en su sonido sin perder sus señas de identidad característica.
En cuanto a los temas, 13 en total, los alemanes vuelven a sus raíces mas metálicas en temas como "Give Em Hall", "Blaze of Glory" o "Conviction", con una estructura y sonido que les acerca nuevamente a Judas Priest y a los discos en solitario de Halford, con esos duelos a dos guitarras y con Ralf cantando en tonos altos y doblando voces, lo que los convierte en ejercicios de heavy metal clásico.
Para los seguidores de un estilo de metal mas aleman y con una mayor influencia de Gamma Ray, nos regalan "Strike" con un coro corto y pegadizo de los de levantar el puño y una base mas power metalera, con Ralf cantando mas melódico, en el mismo saco podríamos meter "And There Was Silence" que incluye otra colección de solos vertiginosos y una guitarra final que le da un toque himnico.
La militante "Bad Boys Wear Black", del que han grabado videoclip, vuelve a contar con un estribillo muy pegadizo y melódico, con el bajo de Sinner marcando el ritmo de la cancion y que encantara a los fans mas fieles.
En el apartado mas melódico "Metal Nation" que parece sacada directamente de su primer Lp con un sonido mas empastado de guitarras y la voz en primer plano, mientras el charles marca el tempo del tema.
Con tintes mas evolutivos dentro del sonido de la banda incluso coqueteando un poco con lo progresivo la extensa "Where Angels Die" introducida por las guitarras y que va subiendo en intensidad hasta llegar a convertirse en un poderoso medio tiempo en el que Ralf se lleva todo el protagonismo con una sentida interpretación, demostrando que no es un cantante limitado a gritar agudos.
"Born Again" es la balada donde un inspirado nuevamente Ralf, es acompañado por guitarras acústicas y eléctricas creando una bonita melodía adornada con arreglos de cuerda y teclado.
La divertida y festiva "Night Of The Jump" con sirena incluida cierra el disco con un toque hard-rockero , inluyendo unas melodías y coros que suenan muy frescos, dejando un muy buen sabor de boca.
Buen disco de los alemanes que lejos de repetirse disco tras disco miran de ir innovando en su sonido sin perder sus señas de identidad característica.