GOTTHARD-FIREBIRTH

Hace un par de años, la noticia del fallecimiento del vocalista Steve Lee en un desafortunado accidente conmociono a toda la escena del hard rock, tras un periodo de incertidumbre sobre el futuro de su banda Gotthard, Leo Leoni y sus compañeros decidieron ponerse manos a la obra en la difícil tarea de buscar un nuevo vocalista que fuera capaz de llenar el enorme vacío que dejo el carismático vocalista. Lejos de optar por un cantante que diera un nuevo rumbo a la propuesta musical de Gotthard, se decantaron por Nic Maeder que posee una voz con una textura y matices muy similares a las del desaparecido Steve Lee.

“Firebirth”, supone el décimo lanzamiento de la banda suiza y de alguna forma viene a ser un nuevo renacer en forma de 13 cortes en los que han optado, por unos temas directos con mucha garra y energía roquera, que se alejan sensiblemente de sus últimos lanzamientos, en los que dejaban demasiado protagonismo a los teclados.

Simplemente escuchar los primeros compases de “Starlight”, sirve para darse cuenta que el cambio de vocalista no va a ser excesivamente traumático para el sonido de Gotthard, impresión que se verá reforzada con la entrada de las guitarras, que nos devuelven a la época más roquera de los suizos, apostando por un ritmo marchoso con unos coros pegadizos y donde el debutante Nic Maeder se presenta mostrando una amplia gama de registros vocales. Los poderosos riffs de guitarra son los protagonistas de “Give Me Real”, una pista contundente, en la que se alternan partes más melódicas, dando forma a un tema vitalista, donde los suizos recuperan su faceta más descarada y fiestera.

Después de un inicio contundente, sentando las bases del sonido de los nuevos Gotthard, llega el momento de las guitarras acústicas en “Remeber It´s Me”, donde Nic Maeder nos muestra su faceta más sensible, demostrando que se adapta perfectamente a los tempos mas baladísticos, consiguiendo transmitir feeling, en un corte emotivo en el que han incorporado arreglos de cuerda. Como su propio nombre indica “Fight” nos trae de retorno la contundencia de las guitarras a las que hay que sumar el retumbante bajo de Marc Lynn, que suena omnipresente en un corte donde el pegadizo estribillo en línea ascendente hará las delicias de los aficionados al buen hard rock.

El espíritu festivo se materializa en la roquera “Yippie Aye Yay”, un rock n´roll marchoso, con mucha presencia de los coros y un estribillo pegadizo y facilon que junto a las vacilonas guitarras dan forma a un tema aditivo, de los que se quedan fácilmente tras un par de escuchas. Durante “Firebirth”, llama la atención lo equilibrado de los temas y después de un corte movido como el anterior es momento de relajarse con una balada como la sentida “Tell Me”, donde el piano y los arreglos de cuerda se funden con las guitarras acústicas redondeando un corte con un aire nostálgico en el que la voz de Nic Maeder dota al tema de un aire a lo Whitesnake.

“Shine”, es un medio tiempo que va creciendo poco a poco, gracias en gran medida a la intensidad de las voces, y sirve para que Gotthard nos muestren su cara más comercial, en un corte que derrocha elegancia, y donde el solo de guitarra aporta ese feeling roquero tan característico en el sonido de la banda. Uno de los cortes mas completos de “Firebirth” es “Story´s Over”, un potente hard rock con reminiscencias a lo Whitesnake que alterna fragmentos lentos con otros donde las guitarras de Leo Leoni Y Freddy Scherer suenan contundentes y en el que vuelve a destacar la potencia vocal y fantástica interpretación de Nic Maerer.

Dando continuidad a la fiesta roquera nos topamos con el talk-box de la pegadiza “Right On”, un corte directo y conciso, con cierto aire macarra, que funcionara muy bien en directo, gracias a su enganchoso estribillo marca de la casa y a que guarda ese aroma a himno ochenteno. A pesar de que durante todo el disco se respira un aire de hard rock clásico, en “S.O.S.”, Gotthard apuestan por una sonoridad un tanto más oscura y envolvente, consiguiendo sonar crudos y contundentes, pero sin perder su personalidad, aunque mirando descaradamente hacia el futuro mas inmediato, quizás dando pistas de cómo puede evolucionar su propuesta de cara a nuevos trabajos.

"Take It All",  es otro medio tiempo en el que la banda derrocha elegancia, facturando una composición donde destaca el trabajo entre ambos guitarristas, y es que son ya dos décadas las que llevan formando equipo Freddy Scherer y Leo Leoni. En cambio " I Can", es el ultimo disparo que Gotthard se han dejado en la recamara, un corte marchoso, con un espíritu muy vitalista  y un ritmo contagioso con el que resulta imposible dejar de mover la cabeza demostrándonos que pese a los duros acontecimientos a los que se han tenido que enfrentar, la banda no ha perdido las ganas de rockear.

Para la despedida final, se han reservado el que es el tema mas sentido y melancólico del álbum "Where Are You" un magnifico homenaje a su compañero desaparecido en forma de balada con sección de cuerda incluida, que consigue emocionar y que sin duda es el mejor tributo que podrían hacer a la figura del malogrado Steve Lee.

Los suizos han conseguido con "Firebirth", facturar un álbum cargado de buen hard rock, en el que consiguen recuperan parte del vitalismo y contundencia que habían perdido en sus últimos lanzamientos,  dejándonos un trabajo que colmara las expectativas de todos sus seguidores.