Si
hablamos de doom metal, no cabe la menor duda, que una de las bandas pioneras
de este género, son los grandísimos Black Sabbath, aunque para ser honestos,
ellos no fueron los únicos en practicar
ese sonido denso y penetrante, que con el paso de los años fue la piedra
filosofal en el que muchas bandas como Cathedral, Candlemass o Hour Of 13,
basaron su propuesta. Junto a los maestros de Birmingham, también podemos
destacar a los americanos Pentagram, y directamente hermanados con ellos, ya
que compartieron a sus componentes, una banda de las que podríamos denominar
“malditas”, Bedemon, una formación que nació en 1971, gracias al impulso de
Randy Palmer, y que justamente ahora, cuando se cumplen 10 años de su
fallecimiento en un desgraciado accidente de tráfico, ve la edición de su
segundo trabajo “Symphony Of Shadows”, que ha salido adelante, gracias al
esfuerzo de sus compañeros, Geof O´Keefe, Mike Matthews y Graig Junghandel, que
han querido homenajear de esta forma al fenomenal guitarrista, compositor y
periodista desaparecido.
Aunque
se formaron a principios de la década de los 70, este "Symphony Of Shadows",
es el segundo lanzamiento oficial de Bedemon, la banda ya público en
2006, una recopilación de material bajo el título de “Child Of Darkness”
en el que se incluían 15 composiciones que repasaban la historia de la formación
desde sus inicios, dejando plasmado su excelente Tradicional
doom metal.
Todo
en este trabajo, rezuma la magia, y el ocultismo típico de los lanzamientos más
oscuros de la década de los 70, y es que los componentes de Bedemon, han
querido rescatar de manera deliberada, ese espíritu del metal más lento,
envolvente, cadencioso y profundo, lo que se nota en algunos detalles como la
crudeza que desprenden los riffs que contiene este “Symphony Of Shadows”, y en
especial en el fantástico sonido de batería, tan orgánico, que da la sensación
de haber sido grabado en directo, sin utilizar recordings ni la ayuda de las
nuevas tecnologías, en unos temas extensos con mucho desarrollo, en los que se
puede apreciar por qué Bedemon, han sido siempre considerados como una de las
bandas de culto y principal influencia de muchas de las bandas que en la
actualidad practican doom metal.
Centrándonos
ya más propiamente en los temas que integran “Shympony Of Shadows”, “Savior”,
es la primera de las perlas y la que se encarga de dar el arranque al disco,
conteniendo esos riffs densos que transmiten esa oscuridad de la que está
impregnado todo el álbum, junto a unas melodías vocales fantasmagóricas, que
son capaces de transportarnos a un ambiente tétrico, ayudando a crear el
entorno ideal para el melancólico desarrollo de las guitarras, muy en la línea
de los canones que marca el doom metal, del que Bedemon, pueden considerarse
creadores, antes de dar paso a un in crescendo, liderado por la voz de Gaig
Junghandel. La batería es la encargada de marcar el ritmo cadencioso por el que
transcurre “Lord Of Desolation”, conteniendo unas penetrantes líneas de bajo,
que inmediatamente nos traen al recuerdo los temas más lentos y
crujientes de Pentagram, dando forma a una pieza en la que no falta el
acompañamiento de las campanas, que da ese ambiente ocultista, ni tampoco los
cambios en las tonalidades vocales que ayudan al tema a tener ese toque mucho
más oscuro.
“Son
Of Darkness”, consigue intercalar de forma brillante partes lentas con subidas
de intensidad, que vienen marcadas por los crujientes riifs de guitarra, que irán
dejando paso a extensos desarrollos instrumentales propios del blues más oscuro
y progresivo de finales de los años 60, lo que sumado a la potente pegada de la
batería dará forma a un corte roquero y potente. “The Plague”, se inicia
con un ritmo lento e inquietante que consigue transportar al oyente a
través de unos desarrollos cargados de nostalgia y melancolía, que acabarán
desembocando en una frenética parte final con la percusión sonando en plan
tribal, mientras las guitarras se concentran en un excelso solo en el que los
mástiles desgranan una secuencia infinita de notas agudas y chirriantes que
consiguen transmitir un punto de histrionismo.
Moviéndose
hacia derroteros bastante más roqueros, y aportando una estructura más directa
que en anteriores temas “D.E.D.”, en el que predomina el dinamismo de unos
riffs rápidos, que consiguen transmitir una gran vitalidad y que contrastan con
el ambiente doom que reina durante todo este trabajo. Siguiendo una línea
similar, aportando un toque todavía más vacilón, demostrando de donde han
mamado su sonido bandas como Monster Magnet , “Kill You Now”, uno de los
mejores temas del disco, con un ritmo dinámico y contagioso en el que destacan
las excelentes melodías vocales y los marcados y rotundos cambios de ritmo, que
hacen pasar al tema de interludios roqueros muy animados a momentos cadenciosos
donde los riffs rocosos y densos vuelven a ser los protagonistas.
Después
de un par de números en los que han predominado el sentimiento roquero y
vitalista es en “Godless”, donde Bedemon retornan a sus característicos medios
tiempos, volviendo a optar por esos tempos intensos, con mucha cadencia, donde
en esta ocasión, serán las voces en primer plano las encargadas de conducir el
tema, mientras una segunda línea vocal consigue aportar un aire oscuro y
demoniaco, transmitiendo esa sonoridad oscura y tenebrosa. Con un lacónico “The
Answer Is So Clear”, se abre “Hopeless”, un laberíntico tema, repleto de
cambios de ritmo, donde Bedemon se encargan de desarrollar todo su potencial
como músicos haciendo mover el tema por diferentes estilos, destacando especialmente
tanto las contundentes voces en la parte inicial, como las melodías de guitarra
que acompañan la segunda parte del tema.
Sonido
denso y oscuro, recuperando la mejor esencia de ese doom metal primigenio es lo
que vamos a encontrar en “Eternally Inhuman”, un corte en el que Craig
Junghandel vuelve a recurrir a sus variados registros como vocalista para dar
forma a un tema en el que los desarrollos instrumentales vuelven a ser los
claros protagonistas, junto al excelso trabajo tras los tambores de Geof
O´Keefe, que es capaz de sacar unos ritmos atronadores de su kit.
Desde
luego la espera ha sido muy larga y cargada de infortunio, hasta poder
disfrutar de este disco de Bedemon, diez años, pero hay que reconocer que el
trabajo está a la altura de cualquier expectativa que sus seguidores pudieran
tener, y por supuesto supone el mejor de los homenajes al tristemente
desaparecido Randy Palmer (R.I.P.), y tal y como recuerda la promo de su sello
discografico, es una hora de clásico doom metal con miembros de la formación
original de Pentagram. Así que ya sabéis, toda una delicia para los paladares
más exigentes.
This album totally ROCKS! Saviour is my favorite song!! 1970's Heavy Metal Doom lovers will NOT be disappointed! Wouldn't be surprised if it received Doom Album of the Year!
ResponderEliminarFuking Rulez, just it.
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