Aunque la génesis de la banda se
remonta al año 2009, cuando eran conocidos como Asfálticca y basaban sus actuaciones en versiones de los míticos
Asfalto, la formación capitaneada por el bajista Javier Canseco, a finales de
2011, decidió cambiar su denominación por la de Asfáltika pasando a trabajar en su propio material. A pesar de
su juventud como formación, lo cierto es que los madrileños están compuestos
por músicos de una calidad contrastada, y un amplio bagaje a sus espaldas. Junto
al ya mencionado bajista Javier Canseco, hay que destacar la participación del
guitarrista Ismael Gutiérrez, el vocalista José A. Álvarez, la teclista Elena
Álvarez, y el incombustible batería Joaquín Arellano.
Para la grabación de este “Mundo
De Cristal”, el quinteto se concentró en los Mágica Estudios bajo la
supervisión del productor Pepe Herrero, con el que han facturado 13 cortes en
los que la banda se mueve ágilmente, y de forma convincente, entre el power
metal melódico, el heavy metal tradicional con tintes ochentero y algunos
cortes en los que nos muestran una faceta más técnica y progresiva, en los que
cobran especial protagonismo los duelos entre la guitarra de Ismael Gutiérrez y
los teclados de Elena Álvarez. Otro detalle a tener muy en cuenta en el álbum,
son los excelentes arreglos y el especial cuidado que la formación ha puesto a
la hora de tratar unas melódicas líneas vocales, en las que destaca la potencia
y elegancia de José A. Álvarez, y sobretodo unos fantásticos y grandilocuentes
coros que se erigirán como protagonistas absolutos de cortes como "Encerrado" o
"Por verte Sonreír".
Tampoco me gustaría pasar por
alto, el amplio elenco de músicos invitados que desfilan a lo largo de las 13
composiciones de “Mundo De Cristal”. Entre los nombres que podemos encontrar,
destacan las aportaciones del propio productor del plástico, Pepe Herrero, el
guitarrista Fran Soler, Dani Aller, Isaac Palón, Glory Romero y Ismael Filthó,
que con sus contribuciones han sido los encargados de poner la guinda a una excelente carta de
presentación para una banda con un futuro muy prometedor.
Desmarcándose completamente de
las tan recurridas intros enlatadas, el disco se abre con el preciosismo que
aportan los arreglos de cuerda que junto al característico sonido del pito
castellano, serán los encargados de liderar una melodía dinámica y contagiosa,
con una marcada orientación folk, que será la que nos transporte sobre los
grandilocuentes coros que marcan el inicio de “Encerrado”, una composición que
arranca con la sutileza de las notas del piano clásico, para ir creciendo
progresivamente hasta convertirse en un trallazo compacto y veloz, liderado por
la poderosa pegada de Arellano y unas guitarras power metaleras que darán forma
a un corte en el que los melódicos y contagiosos estribillos aportaran la garra y el gancho necesario para dar
mordiente a un incisivo canto al optimismo.
Contrastando con el positivismo
del tema anterior, el quinteto nos ofrece “Infierno”, una pieza que desde su
enrevesado arranque nos propone unas estructuras algo más densas y oscuras, en
las que destacan la potencia de las líneas de bajo de Canseco junto a unas
envolventes armonías de corte arábico
que serán las encargadas de dar dramatismo e intensidad a una letra crítica y
cruda, que nos relata los horrores de la guerra vistos a través del objetivo de la cámara de un reportero.
Volviendo a poner todo el acento y el protagonismo en los teclados de Elena
Álvarez, nos topamos con los pasajes melódicos y elegantes de “Batallas”, un
corte en el que las estructura galopante de la base rítmica se verá completada
por unas líneas vocales agudas y potentes, dejando paso a un estribillo muy
pegadizo que se verá rematado por un excelente solo de guitarra.
Si ya viendo la portada y el título del álbum, resultaba evidente las inquietudes ecológicas
de la banda, es en el reflexivo recitado de “¿Qué Es El Hombre?, cuando el quinteto
ratifica sus preocupaciones sobre el tema, para posteriormente abalanzarse
sobre el tema que presta su nombre al plástico “Mundo De Cristal”, la pieza
que, para el que suscribe, es el corte más brillante de todo el álbum.
Partiendo desde unos rimbombantes
arreglos corales, el quinteto nos transporta a través de una composición
cambiante y compleja, dentro de la que tienen cabida, tanto influencias
clásicas del rock setentero como ráfagas netamente heavy metaleras, que se
verán rematadas por unos estribillos envolventes y concisos.
Uno de los mayores atractivos de
este debut de los madrileños, es la tremenda polivalencia que muestra la banda,
ya que lejos de mantenerse encasillados dentro de unas estructuras muy marcadas,
la banda se muestra muy ambiciosa y confiada a la hora de experimentar con su propuesta en diferentes sonoridades, fusionando pasaje cargados de sensibilidad y
melodía con desarrollos más compactos e incisivos, como sucede durante el camaleónico
“En Mi Corazón”, donde se alternan pasajes cargados de sutileza con desarrollos
potentes y compactos, en unos tempos impregnados de aromas progresivos. Aunque
durante todo el álbum, el guitarrista Ismael Gutiérrez, deja clara su calidad
como guitarrista, con diferentes solos en cada uno de los temas, lo cierto es
que en la instrumental “Lamentos”, el
hacha brilla especialmente,
ofreciéndonos un virtuoso desarrollo instrumental, desbordante de esencia clásica y buen gusto.
De vuelta a terrenos más hard
roqueros, nos encontramos con la pegadiza “Eres Mi Libertad”, un pelotazo
directo e impregnado de ese aroma a heavy metal clásico de la década de los ochenta, en el
que las melodías vocales y los pegadizos coros brillan especialmente, dando
forma a un tema cargado de buen gusto, y para el que han contado con la
colaboración de Isaac Palón de Viga. Es quizás “Sombras Del Pasado”, el corte
que tiene una orientación sinfónica más marcada de todo el álbum, redondeando
un medio tiempo cargado de intensidad, en el que destaca la potencia y
personalidad de los registro vocales de José A. Álvarez, y para el que han
contado con la participación de Ismael Fitlhó, que será el encargado de poner
la guinda al tema, regalándonos un breve y conciso solo de teclado.
Siguiendo con las colaboraciones
vocales, nos encontramos con una intensa y potente “Por Verte Sonreír”, para la
que han contado con la vocalista Glory Romero de Guadaña, dando forma a un tema
muy orientado, nuevamente, hacia los sonidos más netamente power metaleros, en
los que las melodías vocales de ambos cantantes se funden dando fuerza y
empaque a un corte vibrante y pegadizo, que se verá culminado por unos
fantásticos coros. Lejos de encuadrarse dentro de unos parámetros power, la
banda vuelve a proponer un nuevo cambio
de dirección estilístico durante la sinfónica “Ultima Voluntad”, demostrando su
enorme calidad como músicos, proponiendo unos vistosos arreglos de cuerda que
se solaparan con la aportación de los omnipresentes teclados de Elena Alvárez, creando una ambientación grandilocuente
junto a unos coros rimbombantes que dejaran paso a un excelente solo de
guitarra a cargo de Fran Soler. El encargado de cerrar “Mundo De Cristal”, es
el conmovedor y triste “Ahora Toca Recordar”, una pieza lenta liderada por las
notas del piano clásico en la que la emotiva voz de José A. Álvarez nos propone una cruda reflexión sobre la vida de los músicos.
Para ser un álbum debut, lo cierto es que el quinteto madrileño ha dejado claramente asentadas las bases de un sonido propio y muy personal, mostrándonos a una banda madura, y con las ideas muy claras de hacia donde se dirigen, sabiendo conjugar en su propuesta la rapidez power metalera, la elegancia propia del sinfonismo y algunas pinceladas progresivas, que ayudan a que su sonido gane en amplitud y sutileza. Sin duda “Mundo De Cristal”, estará entre los mejores álbumes debut de este año 2013.
Lista de Temas
1- Océanos de soledad
2- Encerrado
3- Infierno
4- Batallas
5- Qué es el hombre
6- Mundo de cristal
7- En mí corazón
8- Lamentos
9- Eres mi libertad
10- Sombras del pasado
11- Por verte sonreír
12- Última voluntad
13- Ahora toca recordar
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