Ardua tarea a la que se enfrentan los barceloneses Döría al tratar de
superar su fantástica ópera prima. Formados en 2010, el quinteto catalán
decidió poner toda la carne en el asador para apoyar el lanzamiento de su debut
"Despertar", realizando una ambiciosa campaña de promoción,- de la
que ellos mismos se encargaron-, con la que consiguieron que su nombre resonara
con fuerza entre todos los seguidores del hard rock y el heavy metal a nivel estatal.
El resultado a tanto esfuerzo y dedicación fue que "Despertar”, acabó
convirtiéndose en uno de los álbumes más destacados del pasado año 2011. Sin
duda, para este vertiginoso despegué de los
catalanes ayudaron, y mucho, los
excelentes directos de la banda, y vídeos como el irreverente y censurado "Caperucita
Feroz", o el épico "Por Si Sirve De Algo", que acabaron siendo el
espaldarazo definitivo para que la banda se convirtiera en una de las revelaciones
del año.
Pese a los magníficos resultados cosechados con esta discrecional campaña
de promoción, de cara a esta segunda entrega Döria han decidido cambiar su
metodología de trabajo, y a diferencia de lo que sucediera con su debut, en
esta ocasión el quinteto ha confiado en el sello Iron Moon Music, para que se encargue de la distribución y promoción de su
nuevo plástico. Para la grabación de "Golpea Otra Vez", la banda se
trasladó hasta los EC Studios de Lugo, para ponerse a las órdenes del
guitarrista José Rubio, quien se ha encargado de las tareas de producción,
consiguiendo elevar la personal
propuesta del combo catalán a una nueva dimensión.
Diez nuevas composiciones y una nueva versión de "Pensavientos",
es lo que se esconde tras la fantástica portada realizada por el artista Joel Marco, quien también se encargó del
artwork de su debut. Si en "Despertar", los temas reclamaban toda
nuestra atención por su frescura e inmediatez, “Golpea Otra Vez" nos
ofrece una colección de temas más complejos y trabajados, en los que la banda,
lejos de repetir esquemas, exhibe la madurez y
la experiencia adquiridas a base
de quilómetros y horas de ensayo, facturando unas composiciones repletas de
detalles e intensidad, que necesitan ser degustadas poco a poco, concentrándose
en cada una de las escuchas para descubrir nuevos matices y texturas.
Sin duda, otro de los grandes activos de los barceloneses es la estabilidad, ya que la formación
continua inalterable, estando compuesta por el vocalista Martí Dòria, los
guitarrista Víctor Vázquez y Laura Moral, mientras que de la sección rítmica se
ha encargado la dupla formada por el batería Pep Rovira y el bajista Lluis
Ripollés.
La elegida para abrir el plástico es “Aún Recuerdo”, una excelente carta de
presentación con la que la banda certifica que han sabido potenciar al máximo
todas las virtudes que ya se adivinaban en su debut, poniendo el acento sobre
unas guitarras más crudas y compactas que junto a la arrolladora base rítmica
conseguirán dar al corte una orientación dinámica y vertiginosa, que se verá
culminada por la excelente labor de Martí Dòria, quien se muestra mucho más
suelto y confiado a la hora de encarar las tonalidades más agudas. Más
novedoso, y hasta cierto punto sorpresivo, me ha parecido “Dos Caras” en el que
la banda, sin perder su identidad, parece aventurarse a explorar nuevos
horizontes, apostando para ello por un
sonido de batería crudo y machacón, que
se verá matizado por unas guitarras con una textura más densa y oscura,
consiguiendo así crear el marco idóneo para que Martí nos sorprenda con un gran
despliegue vocal, moviéndose con soltura desde los tonos graves del inicio a
unos altísimos agudos que serán los encargados de conducirnos sobre un trepidante
y rotundo final.
Aunque resulta evidente, desde los primeros compases del álbum, que las
guitarras de Laura y Víctor suenan ahora mucho más potentes e incisivas, es en
los temas que tienen una mayor carga guitarrera cuando mejor puede apreciarse ese endurecimiento en el sonido de los
catalanes, consiguiendo que temas de cariz roquero como el contagioso “Como Uno
Más”, suenen tremendamente frescos y adictivos. Las atmósferas más complejas y
cambiantes se convertirán en las protagonistas del camaleónico “Desdibujando
Sueños”, el que personalmente creo que es uno de los mejores cortes del álbum, ya
que en él se funden de forma magistral las envolventes melodías, la intensidad guitarrera, y unas melancólicas líneas vocales que potenciarán al
máximo la personalidad del corte.
Muchos más directa y rabiosa resulta
“La Soga”, una pieza que guarda un gran paralelismo con las composiciones más directas
y marchosas de su opera prima, convirtiéndose en una apuesta segura de cara a
los directos. Mucha caña, una letra crítica y cachonda, y un Martí rasgando sus
cuerdas vocales al máximo son los principales alicientes de un tema desbordante de actitud macarra y mala leche.
El dinamismo y profundidad de la base rítmica volverá a erigirse como el motor
que impulse el hard roquero “Bajo La Nieve”, en el que el quinteto ira
alternando pasajes más animados y marchosos con otros más melódicos y
envolventes, todo ello culminado por una letra cruda e introspectiva, que como
la mayoría de los textos del álbum está escrito en primera persona.
Quizás, la cara más melómana de los catalanes queda plasmada en cortes como “Buscando En el
Cielo”, en el que las guitarras pierden algo de esa característica mordiente
metálica para concentrarse en la sutileza propia del hard rock, redondeando una
composición altamente dinámica y melódica en la que Martí se convertirá en el
auténtico protagonista, imprimiendo personalidad a un corte que se verá
culminado por una sobria aportación solista.
El momento tierno del álbum viene
marcado por la sentimental “Sigo Aquí”, una pieza cargada de emotividad, e
interpretada durante el tramo inicial por Martí, únicamente acompañado por el piano
de Dani Trujillo, para que posteriormente se sumen el resto de sus compañeros
para crear la intensidad y la emoción necesarias para convertir la pieza
en uno de los momentos más vibrantes del
álbum.
El pulso roquero se recupera con el contagioso “Guíame”, introducido por
una bonita armonía vocal, y en el que la banda apuesta nuevamente por esos pasajes más melódicos y resplandecientes
sobre los que Martí nos ofrecerá una nueva
exhibición vocal, mostrando todo su potencial como vocalista, facturando una
pieza repleta de optimismo y luminosidad. Siguiendo una línea similar a la del
corte anterior, pero poniendo el acento en el sonido de las guitarras, que
vuelven a sonar más potentes y adictivas, nos encontramos con “Sin Mascara”, en
la que el peso de la composición recae sobre unos contagiosos estribillos que convertirán
el corte en una pieza ideal para los directos. Por si no hubiera sido suficiente
el reto de intentar superar su primera obra, la banda ha decidido cerrar el
plástico rescatando para la ocasión el enérgico “Pensavientos”, para transformarlo
completamente y convertirlo en una pieza acústica y delicada.
Tras la brillante carta de presentación que supuso “Despertar”, este
segundo trabajo de los catalanes Döria nos sirve para ratificar las buenas
sensaciones que ya nos dejaron con su apabullante debut. Así que si fuiste de
los que cayeron rendidos ante las melodías y los estribillos de temas como “Caperucita
Feroz” o “Ciudad Esperanza”, no me cabe la menor duda de que este “Golpea Otra
Vez”, colmara con creces tus expectativas, ya que personalmente creo que el
quinteto ha dado un nuevo impulso a su carrera, afianzando su propuesta y
facturando unos temas mucho más maduros y compactos.
Lista de temas
01. Aún Recuerdo
02. Dos Caras
03. Como Uno Más
04. Desdibujando Sueños
05. La Soga
06. Bajo La Nieve
07. Buscando En El Cielo
08. Sigo Aquí
09. Guíame
10. Sin Máscara
11. Pensavientos (Acústico)
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