Ese revival heavy metalero que están protagonizando un puñado de jóvenes
bandas europeas, que parecen empeñadas en revivir el clásico sonido de la
N.W.O.B.H.M., sin duda está cuajando con
fuerza entre una nueva generación de
seguidores que han descubierto,- gracias a la irrupción de nombres como R.A.M., Enforcer o Steelwing-, esa
actitud y esa consciencia de escena “underground” propia de finales de los 70 y
principios de los 80. Además de esta creciente escena, ya bastante arraigada en
la vieja Europa, parece que el continente americano también está
reclamando su cuota de
protagonismo, y a los nombres
anteriormente citados hay que añadir ahora los de canadienses Cauldron, Skull
Fist y los angelinos White Wizzard.
Aunque, a priori, un domingo por la tarde no parece el mejor horario para un concierto de heavy metal, lo cierto es que el trío californiano Night Demon se presentaba en la Ciudad Condal por primera vez en la Sala Rocksound del Pueblo Nuevo para ofrecernos una buena muestra de su heavy metal clásico y añejo, repleto de guiños y licencias hacia las banda que forjaron el sonido que todos amamos.
Con tan solo un EP publicado hace un par de años y con la mirada puesta en la
edición de su debut debut, que está prevista para este mismo otoño, los americanos
desplegaron durante algo más de una hora todo su potencial metálico,
demostrando muchas tablas, actitud y unos temas repletos de intensidad, punch
y feeling. Aunque la sala no llego a
llenarse, el hecho de que a pocos metros
tocase el legendario vocalista Michael Montoe y que con la entrada a ese
concierto se pudiera acceder al del trío
acabó propiciando que la sala presentara un buen aspecto para la
descarga del poderoso combo americano.
Pese a que la gran mayoría de los asistentes se acercaron con mucha
curiosidad para seguir la descarga de Night Demon, lo cierto es que gracias a
la red todos sabíamos que los californianos practican un heavy metal rápido,
crudo y altamente contagioso, basado en la inmediatez de sus rabiosos riffs y
en la enorme pegada de su apabullante base rítmica. Sustentados por esa
atractiva formación de trío, que un puñado de jóvenes bandas parecen empeñadas
en recuperar, los californianos arrancaban su descarga como un auténtico
torbellino con la marchosa "Ritual", una certera carta de
presentación con la que el trío dejaba una fantástica impresión al cerca del
medio centenar de aficionados que se reunieron para presenciar su descarga. Sin
entretenerse en presentaciones, la formación nos espetó una de las piezas que
formará parte de su próximo debut, el rabioso "Satán", con la que
dejaban bien claro su predilección por las letras oscuras y ocultistas.
Con los ánimos ya caldeados y tras un par de bromas haciendo referencia al
día de la madre, que este domingo se celebraba en los países de influencia
sajona, llegaba el momento del crujiente "Save Me Now", de pegadizo
estribillo y que se convirtió en la excusa perfecta para hacernos cantar. Con
tan solo un EP en el mercado resultaba obvio pensar que el trío tendría que recurrir
a los covers para completar su repertorio, así que el primero en caer fue el
eléctrico y roquero "Lighting to the Nation", de Diamond Head, en la que Jarvid Leatherby destrozó sus
cuerdas vocales mientras formaba junto a John Crear esa aplastante y demoledora
base rítmica. Sin perder ese feeling clásico, la siguiente en sonar fue la resultona pieza que prestará su título a su
debut "Run For Your Life", con
la que conseguía mantener la expectación y el buen rollo reinante en la sala.
Muy destacable durante todo el show fue el concurso de su guitarrista Brent
Wiidward quien, pese a mantenerse siempre en un discreto segundo plano, se
marcó una actuación realmente demoledora, sabiendo alternar esos compactos y
rotundos riffs con unos desarrollos ágiles y muy dinámicos como sucedió durante
la hímnica "Heavy Metal Heat". Tampoco quisieron dejar de lado los
tempos más densos y compactos que protagonizaron piezas como la oscura
"Curse Of The Damned" en la que el trío mostraba su devoción por el
clásico sonido “Sabbath”, compactando esos intensos riffs, sacados del libro de
estilo del maestro Iommi, con la brutal base rítmica, consiguiendo crear una
atmósfera pesadumbrosa y ecléctica.
Si ya la primera parte del show del trío americano había sido suficiente
para justificar los 5€ que costaba la entrada a su show, fue durante la segunda
parte del mismo cuando la banda se soltó de forma definitiva, atacando piezas
tan compactas y poderosas como la vertiginosa "Full Speed Ahead", la
arrolladora Ancient Evil", con Jarvid Leatherby abalanzándose
prácticamente sobre la audiencia inyectando mucha garra y desbordando actitud,
y su marchosa versión de Riot "Road Racin". Para encarar la recta
final del show la banda optó por el
clasicismo hard roquero de "The
Chalice", y la pieza que sirve para dar nombre a la formación, la enérgica
"Night Demon", una pieza que
resume a la perfección la esencia de la banda: garra, velocidad, fuerza, pero
ante todo esa efervescente actitud metálica de la que hacen gala los
americanos.
Debido
a la insistencia de los presente la banda se vio obligada a regresar sobre las
tablas del pequeño Rocksound para ofrecernos una última muestra de su
potencial,regalándonos como único bis de la noche "Axe Crazy" que
sirvió como adiós definitivo. En resumen, grata sorpresa la que nos ofreció el
trío californiano Night Demon, demostrando que desde el continente americano
también saben hacer ese heavy metal clásico y añejo, de auténtica categoría que bebe directamente
de las fuentes de la N.W.O.H.M. Habiendo presentado sus credenciales en directo
y viendo la respuesta de los asistentes al concierto seguro que esta no será la
última visita de los americanos por tierras catalanas. De modo que, visto lo
visto, habrá que estar muy atento al debut de Night Demon, ya que estos chicos
prometen, y mucho.
TEXTO Y FOTOS:ALFONSO DIAZ
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