Artizan pueden ser considerados como un
"rara avis" dentro de la escena metálica americana, y no lo digo
únicamente por que el combo de Jacksonville practique un estilo más afín al
público europeo, como es el power metal con toques progresivos, sino por que
para su tercera obra de estudio "The Furthest Reaches" se han
embarcado en un álbum conceptual basado en una historia de ciencia ficción que
narra el retorno a nuestro planeta de una raza alienígena después de recibir
una señal de auxilio. Tras la buenas críticas cosechadas con su anterior
trabajo "Ancestral Energy" (2013), al que personalmente creo que le
faltaba un poco de "punch", especialmente en las guitarras, el ahora
quinteto, tras la incorporación del guitarrista Bill Staley, ha vuelto ha
repetir con el afamado productor Jim Morris en los míticos Morrisound Studios
de Tampa, Florida.
Para redondear esta ópera rock Artizan han
contado con las colaboraciones especiales del ex-vocalista de Iced Eart y
actualmente en Ashes Of Ares, Matt Barlow, quien también apareciera en su
anterior entrega, y con la vocalista de Seven Kingdoms, Sabrina Cruz. En cuanto
al contenido musical de "The Furthest Reaches", lo cierto es que el
sonido de la banda se ha visto enriquecido y potenciado con la inclusión de una
segunda guitarra, algo que les ha permitido dar un mayor dinamismo a sus
composiciones, concediendo un mayor protagonismo a esas características
melodías dobladas que evidencian la influencia de nombres clásicos como Iron
Maiden o Judas Priest. Pese a ello, en todo momento la banda mantiene intacta
su personalidad gracias al elegante y
cristalino registro de su vocalista Tom Braden.
La encargada de ambientarnos y ponernos en
situación será "Coming Of Age", una introducción en la que una madre
manda a dormir a su hijo y le empieza a relatar la historia que marcará todo el
álbum. Un potente redoble será el encargado de dar el pistoletazo de salida a
"Summon The Gods", un up-tempo melódico, épico y grandilocuente que
irá creciendo en intensidad progresivamente para perfilar las líneas maestras
que marcarán todo el plástico. En él serán perfectamente apreciables esas
pinceladas progresivas, especialmente en los cambiantes ritmos nos propondrá la
base rítmica formada por el batería Ty Tammeus y el bajista Jon Jennings. A
diferencia de lo que sucediera en “Ancestral Energy”, tanto las guitarras como
la propia voz de Braden suenan ahora mucho más compactas y afiladas en piezas
como "Hopeful Eyes", aunque
el vocalista sigue mostrando su faceta más lírica y melódica a la hora de
atacar los estribillos, alargando los finales de cada verso para dar al tema
esa inconfundible ambientación hímnica que tanto gusta a sus seguidores.
Lejos de las estructuras predecibles y los
temas lineales, el combo americano no ha escatimado esfuerzos a la hora de
incluir en sus nuevas composiciones arreglos de cuerdas o coros grandilocuentes
para conceder unas mayores cuotas de dramatismo a piezas como "The
Furthest Reaches", que pasa por ser uno de los momentos más brillantes y
dinámicos de todo el plástico, con el quinteto moviéndose por diferentes
texturas para facturar una pieza que recuerda a bandas como los míticos
Queensrÿche. Las tonalidades sonoras se tornaran mucho más oscuras durante el
intrigante arranque de "The Cleansing", con la base rítmica marcando
marcialmente el paso en un camaleónico medio tiempo en el que brillará con luz
propia la magnífica interpretación de Tom Braden, desbordando intensidad y dramatismo
por los cuatro costados junto a la aportación de Matt Barlow.
Un desarrollo de corte bluesero, matizado
con el preciosismo de las guitarras acústicas, será el protagonista del tramo
inicial de "Wardens Of The New World", que será la pieza escogida
para la aparición de Sabrina Cruz, dotando a la pieza de un dinamismo que le
permite destacar del resto de las composiciones del álbum, especialmente por los
seductores cánticos de la vocalista, y por unos estribillos a dos voces
realmente potentes. "Heed The Warning", volverá a conducirnos al
dormitorio del infante que está escuchando la historia para adentrarnos en el
tramo final del disco con el torrente épico contenido en el apocalíptico
"Supernova", en el que se alternaran fragmentos contundentes, unos
interesantes desarrollos instrumentales, protagonizados por las guitarras de
McConney y Staley, y unos estribillos altamente adictivos.
"Starchild", una nueva
conversación entre madre e hijo, nos conducirá sobre el desenlace de la
historia "Into The Sun", en la que el combo americano vuelve a
centrarse en las estructuras más netamente power metaleras, presentándonos un
medio tiempo cargado de garra e intensidad guitarrera. Desmarcándose totalmente
de la historia conceptual, y a modo de bonus-track nos topamos para cerrar esta tercera entrega
de los de Jacksonville con la deliciosa balada "Come Sail Away", una
especie de canción de cuna en la que volverá a brillar con luz propia la
interpretación de Tom Braden.
Artizan han facturado con su obra más
madura y ambiciosa, apostando por dar continuidad a un equipo de sobrada
experiencia y calidad, indagando en un estilo personal y reconocible, pero que
en esta ocasión se ha visto potenciado a su máxima expresión gracias a la
inclusión del guitarrista Bill Staley, dando a la formación ese plus de garra e
intensidad del que antes carecían.
DISCOGRAFICA:PURE STEEL RECORDS
Lista de Temas
01. Coming Of Age
02. Summon The Gods
03. Hopeful Eyes
04. The Furthest Reaches
05. The Cleansing
06. Wardens Of The New World
07. Heed The Warning
08. Supernova
09. Starchild
10. Into The Sun
11. Come Sail Away (bonus-track)
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