INICIO

martes, 18 de abril de 2017

DARK TRANQUILLITY+OMNIUM GATHERUM-RAZZMATAZZ 2-BCN-9-ABR-2017


Parece que vuelven a estar ahí, en la cresta de la ola. Y es que viendo el estado de forma que exhibieron Dark Tranquillity a su paso por la Ciudad Condal presentando su undécima entrega , “Atoma”, resulta  evidente que la banda del carismático Mikael Stanne está  atravesando uno de sus mejores momentos justo cuando están a las puertas de conmemorar  el vigesimoquinto aniversario de su debut “Skydancer”. Durante estos años el combo sueco ha ido redefiniendo su propuesta disco a disco, ampliando miras para incluir nuevos elementos y sonoridades que le han permitido evolucionar y no repetirse. La principal novedad en el seno de la banda venía dada por la incorporación de los guitarristas  Johan Reinholdz (NonExist, Andromeda) y Christopher Amott (ex–Arch Enemy), junto a  la presencia del  ex–bajista de In Flames, Anders Iwers.

Para acompañarles en su desembarco en tierras catalanas contarían con el concurso de Omnium Gatherum, con quienes están girando por el Viejo Continente como actos de apertura de los vikingos de Tumba,  Amon Amarth. Pese a estar programada la cita para la jornada del domingo, lo cierto es que el local acabó presentando  una muy buena entrada. Así que cuando los encargados de abrir la velada aparecieron en escena  ya se respiraba un fantástico ambiente en la sala mediana del Razzmatazz. Y es que parece que nadie quería perderse la descarga de unos Omnium Gatherum  que tiraron  de veteranía y tablas para conseguir conectar con el respetable a base trallazos crudos y certeros como la inicial  “The Pit”. Pese a que la propuesta del sexteto de Karhula  estuvo muy centrada en el death metal, no  faltarían a lo largo de su presentación pasajes melódicos y de tintes  melancólicos durante “Skyline”, que nos dejaba un fantástico  trabajo del guitarrista  Markus Vanhala.

Si durante los primeros compases del show Omnium Gatherum se habían centrado en las composiciones de su último redondo “Grey Heavens”, tras haber captado la atención de una entusiasta audiencia tocaba bucear en su amplia discografía, y que mejor que proponernos  las envolventes melodías que marcarían “Ego”. Aunque  esta era su primera incursión en tierras catalanas, los finlandeses no tendrían dificultades para granjearse el favor de un público  que acompañó   con palmas los desarrollos  intermedios del efectivo  “Frontiers”.

Pero sin duda si hay algo que marcó la descarga de Omnium Gatherum fueron esos riffs compactos y voraces que propiciaron   que temas como “In The Rim” o “The Sonic Sign”, acabaran recibiendo una cálida acogida. Con las primeras filas cada vez más animadas, los finlandeses  no abandonarían el material de su sexta entrega “Beyond”, para adentrarnos en una recta final que estaría marcada por los hímnicos cánticos de “New Dynamic”. Mientras que para rubricar  sus cuarenta y cinco minutos sobre las tablas optarían por la pieza que daba título a su quinta entrega  “New World Shadows” y  los aromas progresivos de la novedosa “Storm Front”.

Tras sus últimas apariciones en nuestro país dentro del marco de los festivales estivales, Dark Tranquillity regresaban a la Ciudad Condal para reencontrarse con un público fiel y devoto que les recibió con los brazos abiertos. Una atípica disposición escénica, -con la batería en un extremo y los teclados en el opuesto-, propiciaría que se creara un espacio  central que sería ocupado por una pantalla sobre la que se irían proyectando diferentes imágenes a lo largo del show. Ataviado con su habitual chupa, -de la que no se desprendería durante toda la velada-, el carismático Mikael Stanne se apoderaría del escenario para liderar a sus compañeros y hacer participe al público desde que abrieran  fuego con “Force Of Hand”, que plasmaba a la perfección la evolución que ha seguido su propuesta  durante los últimos años. Sin apenas tiempo para reponernos del primer impacto de la noche, un desfile de cráneos serviría como ambientación para los brutales cambios  de “The Lesser Faith”, que fundía  magistralmente  la rotunda pegada  de las guitarras  y los envolventes teclados de Martin Brändström.

Durante la primera charla de la noche, el carismático frontman  nos agradecería nuestra presencia y se disculparía  por el largo tiempo sin visitar nuestra ciudad antes de que los teclados nos adentraran en la versatilidad estructural de “Atoma”. El primer gran momento de la noche, con la gente enloquecida coreando la melodía, llegaría con un “The Treason Wall” que sonó absolutamente matador. La primera mirada sobre su anterior entrega “Construct” estaría reservada para las oscuras ambientaciones de  “The Science Of Noise”, que nos volaría la cabeza con la rotunda pegada de un Anders Jivarp que se mostró pletórico a lo largo de todo el show.

Aunque la banda presentaba diversas novedades en su seno, lo cierto es que Dark Tranquillity sonaron fieros, rotundos  y compactos. Precisamente sería el amenazante bajo de Anders Iwers el encargado de adentrarnos en “Forward Momentum”, que rompía la dinámica que estaba llevando el show para permitir que Mikael nos ofreciera otra buena sucesión de registros limpios. No tardarían en regresar la velocidad y la voracidad metalera con las incisivas guitarras de “Terminus (Where Death Is Most Alive)” y “The Silence In Between”, que volvían a desatar la locura entre unas primeras filas cada vez más eufóricas y animadas.

Por si alguien todavía no había puesto nombre a las nuevas incorporaciones que presentaba la formación, Mikael se encargaría de ejercer como maestro de ceremonias durante los prolegómenos de “The Pitiless”, que era la elegida para volver a centrar nuestro objetivo sobre el material de “Atoma”, con el frontman rugiendo amenazante para protagonizar otra andanada marca de la casa. Pese al extenso catálogo de los suecos, debo admitir que me sorprendió que esta primera parte del show estuviera centrada en el material que han facturado durante la ultima década. Quizás por ello no faltarían piezas repletas de contrastes y matices como “What Only You Know”.

Pero que nadie piense que  Dark Tranquillity se iban a dejar en el tintero  algunos de sus temas mas emblemáticos, ya que no faltaría la rabia desatada en “Monochromatic Stains”, que volvía a poner al público en movimiento  mientras Mikael nos miraba complacido desde el filo del escenario. Su viaje regresivo hacia el pasado  proseguiría con “The Wonders At Your Feet”, -que fue rematada por un fantástico solo del menor de los hermanos Amott-, y “White Noise/ Black Silence”, que nos hacía viajar a los tiempos de “Damage Done” para conformar una  de las duplas más celebradas de la noche.

El contraste entre el pasado y el presente  quedaría plasmado en “Neutrality”, con los teclados volviendo a cobrar protagonismo antes de que la batería de Jivarp  se encargara de propulsar un nuevo ataque de Amott y Reinholdz. Más oscura y tortuosa sonaría la también novedosa “Clearing Skies”, que pese a su ritmo más cadencioso conseguía mantener la intensidad del show. Una nueva mirada sobre su obra de 2002 serviría como pretexto para recuperar los entrecortados riffs de “Final Resistance”. Mientras que para introducir una nueva nota de color y adentrarnos en tesituras más góticas y ambientales el sexteto nos propondría una celebradísima “There In”, que a la postre se acabaría convirtiendo en el único guiño que se permitieron al material facturado durante la década de los noventa.

Para su retorno sobre las tablas los suecos  nos tenían  preparada una suculenta sorpresa, ya que estrenarían en directo  la composición que abre su última obra, “Encircled”. Si vibrante y eléctrica había sido toda la velada, el sprint final estaría protagonizado por las melódicas sonoridades de “State Of Trust”, la demoledora “Through Smudged Lenses” y las coreables melodías que marcarían la final “Misery´s Crown”.

Al final del show un sonriente Mr. Stanne permanecería en escena durante varios minutos para recibir el caluroso aplauso de una audiencia entregada. Una vez más Dark Tranquillity volvieron a reivindicarse como uno de los  pilares básicos    para comprender la evolución del death metal melódico. Aunque, personalmente, debo admitir que eché en falta algún  tema de sus primeros trabajos.




TEXTO:ALFONSO DIAZ
FOTOS:CARLOS OLIVER

No hay comentarios:

Publicar un comentario