Desde que se
alzarán con el triunfo en el W.O.A. Metal Battle Spain de 2013 y representarán
a nuestro país en el prestigioso festival alemán Trallery se han convertido en
uno de los nuevos valores de la escena metal nacional. Tras la fantástica
acogida que obtuvo su debut
"Catalepsy" y sus demoledores directos, que quedaron plasmados en el
EP "Path To Live", el trío de Palma de Mallorca publicaba a finales
del pasado año "Spiritless", un álbum en el que los baleares dejaban
claro que son algo más que una banda de thrash metal old school.
Bajo la
denominación de Thrash Metal Attack la formación balear encabezaba un atractivo cartel que contaría con la participación de Holycide, el nuevo
proyecto del vocalista de Avulsed, Dave Rotten; y los badaloneses Acromizer que
nos presentarían las composiciones de su debut "Spreading The
Plague", que veía la luz a finales de 2015. El campo de batalla donde tuvo
lugar este triple ataque fue la Sala Monasterio del Port Olimpic de la
Ciudad Condal, donde un buen numero de seguidores, con una nutrida
representación de músicos, ratificaba la hermandad de la escena thrasher
catalana.
Con la gente
todavía accediendo al local aparecían en escena Acromizer dispuestos a
ofrecernos una buena sesión de thrash metal old school. Liderados por su
vocalista y guitarrista Eduardo Juanes, el cuarteto contaría con el concurso a
la batería de Alfonso,- (compañero de
Edu en Alyanza)-, para volarnos la cabeza con las afiladas guitarras de
“Frustrated Is Not The Way”. Pero no todo iba a ser rabia y velocidad
desenfrenada, ya que Acromizer demostraron que también se saben mover en
tesituras más melódicas durante los desarrollos de “Coldness”, que nos invitaba a alzar los puños
al aire mientras el ambiente se iba caldeando en el local.
Tal y como comentó
el propio Edu esta era una noche para thrashear, de modo que la maquinaria de
los catalanes volvería a rugir intensamente
durante la “balada” “Caught Off Guard”,
que nos hacía agitar frenéticamente la cabeza siguiendo sus vertiginosos riffs.
Para contemporizar un poco los ánimos y permitirnos recobrar el aliento después
de un arranque trepidante optarían por los redobles marciales que nos abocaron sobre la épica “Born To Die Alone”.
Tampoco faltarían
a lo largo de su presentación piezas como
“Lost In The Dead Zone”, que nos adentraba en el siniestro mundo de los
zombies. El paseo por su peculiar galería
de lo horrores proseguiría con “Killer Life”, que narra las peripecias de
Enriqueta Martí, La Vampira de Barcelona, una asesina en serie que con sus
crimines sembró el pánico en el centro de Barcelona a principios del siglo XX.
La recta final de
su show estuvo reservado para la pieza que cierra su debut “The Other Side”,
que combina a la perfección sus
devoradores riffs y unos coros altamente contagiosos; y una escueta versión del
clásico de los germanos Tankard “Empty Tankard”.
Debo admitirlo,
tenía muchas ganas de ver en directo a Holycide ya que, habituado a ver a Dave
Rotten al frente de Avulsed, esta noche tendríamos ocasión de ver al vocalista en un registro
diferente. Con la gente arremolinándose frente al escenario y mientras unas
estruendosas sirenas nos alertaban de lo que estaba por llegar el quinteto irrumpía
en escena para noquearnos con “Afterworld Remnants”. Respaldados sobre un
sonido demoledor los madrileños nos sorprenderían con un thrash metal personal
y agresivo, desmarcándose del clásico sonido old school para hacernos sucumbir
con la monumental pegada de “Eager To Take Control”.
Como suele ser
habitual el carismático Rotten nos hizo esbozar más de una sonrisa con sus
ocurrentes comentarios entre tema y tema. Y es que durante su actuación tampoco
faltarían sus clásicos molinillos mientras atacaba las estrofas del tema que han dedicado al irrepetible Lemmy Kilmister,
“Motörhead”, cuyo estribillo esta compuesto por títulos de diferentes clásicos
de la banda. Pese a que a estas alturas el ambiente estaba ya muy caldeado, la
chispa que encendió definitivamente al personal
fue el cover de Sepultura “Beneath The Remains”,
que nos ponía a todos a cantar.
El momento de
montar el wall of death llegaría durante el tramo central de “Bonebreaker”, que
personalmente fue de las que más me gustaron. Aunque el grueso del repertorio
de Holycide estuvo centrado en las composiciones de su primer largo
“Annihilate… Then Ask!”, no se dejarían en el tintero algún guiño a su EP
“Toxic Mutation”, rescatando para la ocasión “Apocalypse Riders”, que nos hacia alzar los cuernos
al aire mientras Rotten saludaba
efusivamente a las primeras filas.
Esa estampa devastadora
y apocalíptica que nos muestra la portada de su flamante nuevo trabajo quedaría plasmada durante las
humeantes acometidas de “Deserve To Be
Erased”, para posteriormente dejar paso
a su versión de los americanos Détente, “Losers”. No levantarían el pie del
acelerador, ya que la rotundidad de la base rítmica marcaría el ritmo que nos adentraba en el tema que
protagoniza su último video-clip “Human´s Last Dawn”, que nos dejaba a Rotten abandonando el escenario para bailar y hacer headbanging
entre el público.
Para rubricar su
brutal presentación optarían por la primera pieza que compusieron y que daba titulo
a su maqueta de 2013, “No Escape” y la propia
“Annihilate… Then Ask!”, que dejaba claro que esta nueva aventura del vocalista
madrileño tiene visos de convertirse en una banda de largo recorrido.
Parece mentira
como con tan solo tres músicos Trallery son capaces de mostrarse tan técnicos y
expeditivos en directo, abarcando diferentes estilos que dotan a su propuesta
de un sello propio y personal. Pese a que el trío balear sólo ha publicado dos
obras de estudio su bagaje como banda de versiones de Metallica les ha servido
para ganar confianza y tablas, convirtiéndoles en una apuesta segura de cara al
directo tal y como demostraron desde que asaltaron el escenario con la visceral
“Spiritless”.
Absolutamente
arrolladores y comandados por un desatado Humberto Pol, que no paró de animar al personal mientras maltrataba las
cuerdas de su bajo, Trallery no tendrían
dificultades para conectar con un público
que se entregó al máximo siguiendo las amenazantes embestidas de “Evil Pride”. Así que mientras el humo se encargaba de ocultar el escenario
el pogo se apoderaría de la pista para acompañar “White Shadow”, que se
convirtió en el primero de los recuerdos que nos ofrecieron de “Catalepsy”.
Muy agradecido por
la respuesta del respetable Humberto no se olvidó de dar las gracias a los
presentes y también a los músicos de otras bandas que habían acudido a ver el
concierto durante los prolegómenos de “Scavenger Crow”, que era la escogida
para abrir la segunda tanda de temas extraídos de su más reciente entrega discográfica junto a
la seminal “Abominate”, que nos dejaba con otro trepidante solo de un Biel
Gayà, que sorprendió a más de uno con su versatilidad para combinar abrasivos riffs y melódicos solos de guitarra.
Sin duda uno de
los momentos de la noche llegaría con el que fue el primer video de la banda
“Collateral Damage”, que se convirtió en la excusa perfecta para que gran parte
de los presentes coreara su fantástica melodía central. Pero no tardaría la
tormenta en volver a estallar con la perturbadora “Hunt to Kill”, que nos
flanqueaba el paso hacia un final apoteósico marcado por los arrolladores coros del clásico de
Metallica “Creeping Death”.
No tardarían mucho
en regresar sobre las tablas para entre los cánticos del persona finiquitar la
velada con “Keep Your Eyes Open”, que
servía como brillante colofón para una
fantástica velada de thrash metal.
TEXTO:ALFONSO DIAZ
FOTOS:CARLOS OLIVER
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