Hubo una época en la que el rock no estaba vetado en las grandes emisoras de radio, en la que las guitarras no estaban “censuradas”, y en la que a través de las ondas hertzianas uno podía escuchar buenas melodías de guitarra y estribillos altamente pegadizos. Lamentablemente esos tiempos pertenecen al pasado, pero eso no quiere decir que no sigan habiendo bandas que apuestan por poner un esmero especial a la hora de tratar las melodías sin descuidar la elegancia y unos melosos y coreables estribillos, y sin duda Arkado son una de ellas. Curiosamente su creación se remonta a principios de la década de los ochenta en la ciudad de Odarka (Suecia). Pero no fue hasta su reunión en 2018, tres décadas después de su disolución, cuando la banda empezó a trabajar junto a sus nuevas incorporaciones en nuevo material. Así que podemos decir que la columna vertebral de este “Never Say Never” está compuesto por nuevas canciones.
Además en un ejercicio de honestidad, que resulta poco habitual en la actualidad, el combo sueco quiere dejar claro que ellos no representan en ningún caso la vertiente más potente dentro de un género tan, en ocasiones, denostado como es el A.O.R. De modo que a lo largo de los once cortes que integran su debut podremos percibir el destacado protagonismo que asumen los teclados y los sintetizadores junto a unas guitarras que suenan frescas y con espíritu roquero. Pero indudablemente lo que acabará cautivando a muchos seguidores del género es su delicadeza a la hora de tratar las melodías vocales, recodando en algunos momentos a los mejores tiempos de sus compatriotas Europe.
Con la luminosidad, la vitalidad, y elpositivismo de unas elegantes melodías que se verán respaldadas por los sintetizadores se inaugura el álbumcon “So Bad”, una pieza que se ciñe a la perfección a los estándares clásicos del A.O.R., gracias a su accesibilidad, lo pegadizo de sus estribillos, y la efectividad de su solo de guitarra. Pese a que el registro de Philip Lindstrand es uno de los grandes activos del combo sueco, lo cierto es que todos los instrumentistas de la banda tienen un relevante valor dentro de la propuesta final del quinteto, con lo que los teclados de Mikael Skafar acabarán siendo los que se encarguen de llevar el peso sonoro del más edulcorado y contemporáneo “To Leave It All Behind”, dejando que sus trabajados estribillos corales sirvan para que el personal se acabe enganchando.
En cambio el primer medio tiempo del álbum se abrirá con un arpegio de libro dentro del hard rock melódico, transportándonos directamente a la década de los ochenta, para dejar que su ganador estribillo, que proclama el título del tema y da nombre al álbum “Never Say Never”, se grabe en el subconsciente del oyente, mientras que la rúbrica al corte correrá por cuenta de la garra roquera que imprime Lindstrand a su registro junto al elegante solo de guitarra. A esa misma ambientación, pero apostando por unas guitarras más potentes que personalmente me han recordado a Treat, recurre “Don’ t Rape The Nature”, aunque eso no significa que el colchón de teclados no acabe reclamando su cuota de protagonismo, ya que a lo largo del tema tendremos ocasión de escuchar un desarrollo solista de Mikael Svensson.
Y es que ese aroma ochentero será el que en ocasiones conceda a cortes como “Walk Your Way” una sonoridad casi popera, con unos omnipresentes teclados y una musicalidad en el estribillo que te resultara familiar, y que puede incluso recordarte a bandas de la new wave. Pese a ello, Arkado no pierden el norte, y rápidamente sacarán a relucir su vertiente más netamente roquera durante “If We Are To Last”, con un gancho y una comercialidad en sus melodías y estribillos que le hubieran permitido ser un potencial single en cualquier radio fórmula durante la década de los ochenta. En términos similares podríamos referirnos a “My Hometown”, aunque quizás su estructura sea algo más lineal aunque en contraposición sus coros resultan todavía más edulcorados y pegadizos.
Si bien puede parecer que este debut de Arkado está repleto de melodías aterciopeladas, lo cierto es que tendremos que esperar hasta la segunda mitad del álbum, con la llegada de “So Fine”, para escuchar la primera balada como tal del combo sueco, y la verdad es que la bordan, con la sutileza del piano marcando la melodía sobre la que Lindstrand firmará una sentida y elegante interpretación. El desmedido protagonismo que ejercen los teclados durante “Eagle” hará que el tema tenga un cierto aroma a rock progresivo, lo que provocará que acabe adoleciendo de esa inyección de potencia que suelen imprimir las guitarras.
Quizás sea por esa falta de adrenalina y garra roquera que comentaba anteriormente por lo que me ha encantado “Carry My Heart” una pieza de melódico hard rock de guante blanco, con unos arreglos vocales perfectos y un fantástico solo. El epílogo para este debut de Arkado llegará con otra sentimental balada conducida por el piano y los arreglos de cuerda que llevar por título “Never Say Never...Again”.
Probablemente este debut de Arkado no va a romper en las listas de éxitos ni va a catapultar a los suecos a las primeras posiciones del Hard rock melódico, pero lo cierto es que contiene un montón de buenas melodías y pegadizos estribillos que seguro sabrán apreciar todos los seguidores del A.O.R. Y el hard rock melódico.
DISCOGRAFICA:AOR HEAVEN
Lista de Temas
1. So Bad
2. To Leave It All Behind
3. Never Say Never
4. Don’t Rape The Nature
5. Walk Your Way
6. If We Are To Last
7. My Hometown
8. She’s So Fine
9. Eagle
10.Carry My Heart
11.Never Say Never Again
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