Creo que todos los que todos los que llevamos lustros rebuscando en las cubetas de vinilos de segunda mano en más de una ocasión nos hemos topado con alguna portada de esta mítica formación finlandesa. Mucho tiempo ha pasado desde que Oz dieran sus primeros pasos como banda en la segunda mitad de la década de los setenta, aunque no debutaron hasta 1982 con “The Oz/Heavy Metal Heroes”, al que siguió un año más tarde el exitoso “Fire In The Brain”, con el que se granjearon el beneplácito del público europeo que seguía a bandas como Saxon, Samson, o Iron Maiden. Desafortunadamente sus siguientes entregas no tuvieron la misma repercusión y la banda acabó separándose tras la edición de “Roll The Dice” a principios de los noventa.
No fue hasta 2011 cuando tres de sus miembros originales el vocalista Ape De Martini, el bajista Jay C. Blade y el batería Mark Ruffneck decidieron revivir a Oz publicando “Burning Leather”, que aunaba nuevas composiciones con algunas regrabaciones de temas de los ochenta. Ya en 2017, y contando únicamente con el concurso de Ruffneck como superviviente del line-up original, la banda volvía a la carga con “Transition State”, que significaba el debut del vocalista Vince Kojvula. De cara a la edición de esta octava entrega de estudio que lleva por título “Forced Commandments”, que significa su debut con el sello alemán Massacre Records, la veterana formación vuelve a repetir formación, contando con los guitarristas Juzzy Kangas y Jhonny Cross, y el bajista Peppy Peltola.
Como bien habrás podido deducir Oz siguen apostando por centrar su propuesta en los cánones clásicos del heavy metal, no en vano fueron considerados en su momento como uno de los precursores de la N.W.O.F.H.M., aunque siguen adentrándose en tesituras más melódicas al igual que ya hicieran en su anterior redondo. Otro detalle a destacar es que han vuelto a poner especial cuidado a la hora de facturar unos coros que resultaran ideales para que sus seguidores puedan corearlos con el puño en alto en sus directos.
Dispuestos a rockear y hacerte mover la cabeza intensamente, así arranca el disco con un riff potente y un agudo y melódico aullido a cargo de Vince Kojvula, para adentrarnos de lleno en “Goin´ Down´”, un corte marchoso, rotundo y altamente melódico, en el que Oz muestran sus armas, dejando que sean sus contagiosos coros los que se encarguen de hacer que el corte atesore la pegada suficiente para ser la perfecta carta de presentación de esta nueva entrega. Y es que las estructuras clásicas pero a la vez melódicas incluidas en temas como “Prison Of Time” harán que su actual propuesta pueda conectar con los seguidores de bandas como Hammerfall, ya que el registro de Vince es bastante similar al de Joacim Cans, aunque parece capaz de sostener notas más agudas. Además también habrá espacio en este segundo corte para que el tándem de hachas tenga ocasión de lucirse en su extenso desarrollo instrumental.
Saliéndose de esa vertiente directa y efectiva nos encontramos con “Switchblade Alley”, que se apoya inicialmente sobre la tenacidad de su base rítmica y un rotundo riff que poco a poco se encargará junto a los coros de los estribillos de hacer que el tema vaya ganando en velocidad hasta convertirse en un crujiente uptempo con una melodía muy coreable. La velocidad del heavy metal volverá a convertir a “Revival” en una de las composiciones más compactas y potentes de esta nueva entrega del combo finlandés, volviendo a centrar nuestro objetivo sobre un estribillo absolutamente ganador.
Pese a que como comentaba anteriormente la banda no ha traicionado sus raíces más clásicas, lo cierto es que será en temas como “The Ritual”, cuando recuperen su esencia más añeja, dejándose ir con un riff y una sucesión de coros que inevitablemente te harán viajar hasta la década de los ochenta. En cambio “Spiders”, nos ofrece una vertiente totalmente diferente dentro de su sonido, apostando por una estructuras más variadas y heterogéneas, no tan previsibles, en las que destacarán sus cambios de ambientación, el trabajo de ambos guitarristas a la hora de encarar esos desarrollos de esencias clásicas, y la forma en la que Vince estira sus cuerdas vocales para dar más dramatismo e intensidad al final de cada una de las estrofas.
El contraste llegará con “Long And Lonely Road”, que arranca mezclando la elegancia de las acústicas con el feeling de las eléctricas para acabar redondeando una balada que rezuma emoción e intensidad, y en donde las guitarras, como no podía ser de otra forma, volverán a erigirse como indiscutibles protagonistas. Para rubricar el álbum Oz se han reservado un carte ganadora, que perfectamente podrían haber usado para abrir el álbum, “Liar”, un zarpazo vibrante, directo y absolutamente devastador, que cuenta con la pegada de un estribillo matador y con el desarrollo clásico de cualquier trallazo de rotundo heavy metal que se precie.
Pero no se acaba aquí el material contenido en esta octava entrega de los finlandeses ya que como bonus-track han incluido el extenso “Diving Into The Darkness”, el afilado y ochentero “Break Out”, y la hímnica “Kingdom Of War”.
Siempre resulta una buena noticia que una banda clásica regrese al primer plano de la actualidad con un nuevo trabajo bajo el brazo. Muchos dirán que su tiempo pasó hace ya bastantes años, pero lo cierto es que los amantes del heavy metal pueden alegrarse de que los míticos Oz estén de vuelta y a tenor de lo que nos brindan en “Forced Commandments”, en un fantástico estado de forma.
DISCOGRAFICA:MASSACRE RECORDS
Lista de Temas
1. Goin' Down
2. Prison Of Time
3. Switchblade Alley
4. Revival
5. The Ritual
6. Spiders
7. Long And Lonely Road
8. Liar
9. Diving Into The Darkness
10. Break Out
11. Kingdom Of War
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