Aunque llevan prácticamente una década surcando los mares para hacer honor a la temible reputación que les precede, los intrépidos corsarios que capitanea el grandullón y enmascarado frontman Captain Yarrface tuvieron que esperar hasta principios del pasado 2018 para poner en circulación su primer largo oficial bajo la denominación de “The Triumph Of Piracy”, una obra en la que Rumahoy presentaban sus credenciales musicales, y sobre todo su apuesta decidida por la diversión y el desmadre convirtiéndose así en uno de los bastiones de ese estilo que ha venido a denominarse Pirate Metal, y del que actualmente son uno de sus máximos exponentes los británicos Alestorm.
Y es que el estilo de ambas formaciones tiene varios aspectos en común como por ejemplo las pinceladas de matiz folk en muchas de sus composiciones, sus gamberros e irreverentes cánticos, su afición a los brebajes etílicos, algún escarceo con la música y los ritmos discotequeros…, pero ante todo lo que más destaca y les une es su apuesta decidida por el buen rollo y el desmadre. Pocas son las novedades que nos presentan Rumahoy de cara a esta segunda entrega, muy acertadamente titulada, “Time II:Party”, con respecto a lo que fue su ya mencionado debut de hace un par de años. Aunque podríamos remarcar que a lo largo de las diez nuevas composiciones que fueron grabadas en los LSD Studios de Lübeck, Alemania, entre Enero y Septiembre del pasado año, los lobos de mar han dejado aparcado cualquier tipo de complejo y atadura estilística en pos de facturar un material de lo heterogéneo, que puede acabar resultando grotesco para los más puristas, pero que sin duda posee el potencial y el gancho suficientes para conectar con las nuevas hornadas de metaleros, y en definitiva para hacerte olvidar los problemas durante los aproximadamente cuarenta minutas que dura el álbum.
Desde el mismo arranque con un ataque frontal y certero a la línea de flotación como es “Cowboys Of The Sea”, la banda deja claro que conoce a la perfección cuales son sus armas y como debe utilizarlas. Así que no faltarán unas melodías dinámicas y adictivas, unos coros pegadizos que invitan a ser coreados con el puño en alto, y todo ello aderezado con algunas pinceladas de corte power metalero y ese aroma folk que convierte esta pieza inaugural en una auténtica fiesta, y en la perfecta carta de presentación para los que todavía no conocían su estilo. La acción se trasladará al interior de la taberna durante “Time To Party”, que tanto por su letra como por su ritmo contagioso y sus juerguistas y gamberros cánticos está llamada a convertirse en uno de los himnos de esta segunda entrega de Rumahoy.
Lejos de aplacarse el ardor festivo que marca el arranque del álbum, la banda seguirá dándonos argumentos para continuar con la fiesta y el desmadre durante “Treasure Gun”, invitándonos a corear ese repetitivo y aplastante estribillo que se vera conveniente aderezado por unos ingeniosos pasajes folkies que se encargarán de redondear un corte desenfadado, excesivo, y que tiene como únicos objetivos hacerte cantar, bailar, y robarte una sonrisa. No esperes encontrarte grandes alardes instrumentales, pero en contraposición prepárate para levantar tu jarra de ron mientras empujas a tus camaradas dando rienda a la locura. Nuestra travesía proseguirá con el que probablemente sea uno de los cortes más inspirados de esta segunda entrega “Legend Of Captain Yarrface”, toda una declaración de intenciones que sirve para que la banda se reivindique como uno de los exponentes de “Pirate Metal”, en un tema que a diferencia de los anteriores si que tiene una parte intermedia con algunos fugaces tintes épicos.
Tal y como comenté anteriormente la propuesta de Rumahoy no destaca precisamente por lo enrevesado de sus estructuras, ni por el virtuosismo de sus instrumentistas. Pero esto no significa que no sepan escribir temas que puedan conectar fácilmente con sus seguidores. pese a que ello signifique en algunas ocasiones repetir una y otra vez la misma fórmula. Y es que el patrón de la mayoría de las composiciones es el mismo: temas cortos, directos, en los que los cánticos de los coros se convertirán en la excusa perfecta para hacer participe al oyente. Y eso es precisamente es lo que nos vamos a encontrar a lo largo de “Harambe, The Pirate Gorila”, en donde, como no podía ser de otra forma, no podía faltar el rugido del gorila. Apartándose de su habitual onda roquera Rumahoy cambiaran diametralmente de registro estilístico para adentrarse en sonoridades próximas al dance y a la música electrónica en el bailongo “Poop Deck Party”, un corte que deja a un lado la furia de las guitarras y la animosidad de los pasajes folkies para concentrarse en los sintetizadores, los ritmos dance, los coros discotequeros, e incluso los rapeados.
La estela gamberra de los piratas seguirá haciéndose patente con un título como “The Beer From My Town Is Better Than Yours”, marcada por un ritmo endemoniado y en el que nuevamente parecen retomar su habitual patrón instrumental dejando que sea la vertiente folk la que se encargue de coronar el estribillo mientras las guitarras liderarán sus desternillantes estrofas. Bastante más épica, y cercana a los actuales parámetros que dicta el power metal europeo, suena “1000 Years Of Dust”, en la que parecen dejar de lado su faceta más festiva para introducirse de lleno en tesituras más tormentosas, poniendo de manifiesto que si se lo proponen también saben crear ambientaciones más maduras y épicas, lo que acabará convirtiendo el tema en uno de los más potentes y cañeros de todo el álbum.
Aunque en un principio podría parecer que esa orientación más sería se mantiene a lo largo de “Full Mask”, bastará con prestar un poco de atención a su letra para comprender el doble significado de sus textos. Aunque ese no quita que sea otra en la que hay que ponderar la acción de los instrumentistas, especialmente del guitarrista Bootsman Walktheplank. Para el final del álbum la banda no puede más que despedirse con una vacilada como es “Stolen Treasure”, que parece un guiño a los chicos de Alestorm.
En definitiva no esperes encontrar en este “Time II:Party”, un disco rompedor, ni que pasará a la historia por sus composiciones. Eso sí, si estáis dispuestos a llenar vuestras jarras con un poco de ron, reuniros con vuestros colegas para compartir unas risas y danzar hasta caer desfallecidos esta puede la mejor banda sonora. Aquí no vas a encontrar mensajes para cambiar el mundo, ni ningún tipo de pretensión. Este es solo diversión.
DISCOGRAFICA:NAPALM RECORDS
1. Cowboys Of The Sea
2. Time To Party
3. Treasure Gun
4. The Legend Of Captain Yarrface
5. Harambe The Pirate Gorilla
6. Poop Deck Party
7. The Beer From My Town Is Better Than Yours
8. 1000 Years Of Dust
9. Full Mast
10. Stolen Treasure
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