martes, 16 de abril de 2024

SPEEDKILLER-INFERNO

 

Ese halo oscuro, maléfico, y el inconfundible aroma a azufre son cualidades que han estado vinculadas desde los albores del estilo a las corrientes más extremas dentro del mundo del metal, hasta el punto en que puede llegar a perderse la perspectiva entre los auténticos devotos de Lucifer, y los que lo usan como un recurso más y, a la postre, algo recurrente y atractivo para simplemente dar rienda suelta a sus inquietudes musicales. He de reconocer que me resulta difícil decantarme entre una y otra opción al hablar de Speedkiller, un trío brasileño, concretamente del estado de Minas Gerais, que tras publicar en 2020 el EP “Midnight Vampire”, nos presenta en este 2024  una obra corrosiva e imparable, en la que combinan thrash metal old school, death,  y furibundo black metal para brindarnos 9 composiciones que de seguro no dejarán indiferentes a los seguidores del estilo.

A pesar de ser su primer largo, lo cierto es que esta formación que está compuesta por el guitarrista y vocalista Yan Nielsen, el bajista Allefer Rocha y el batería Hellkrätus suena como una auténtica apisonadora, apoyándose en un sonido orgánico y muy cuidado, en el que puede percibirse la devoción por bandas clásicas de la N.W.O.B.H.M., aunque sin dejar de mirar de reojo a otros nombres míticos como los primeros Slayer, los alemanes Kreator, o por supuesto sus paisanos Sepultura; y es que a lo largo de este debut son varias las conexiones que podemos trazar con trabajos como el mítico “Schizophrenia”. En cualquier caso, pese a presentar una propuesta deudora de los años de mayor esplendor del género, que nadie espere una producción en plan vintage, ya que todo, absolutamente todo, suena perfecto, permitiéndonos disfrutar de todos y cada uno de los instrumentos, aunque conservando ese toque clásico que hace que el disco acabe resultando tremendamente atractivo para los que disfrutamos en su momento de algunas de las bandas anteriormente citadas.


Quizás, teniendo en cuenta todo lo anteriormente expuesto, uno podría esperarse a modo de introducción un pasaje aterrador. Pero no, los compases de apertura de la inicial “The Birth Of Immortal Evil”, estarán marcados, sorpresivamente, por un arpegio acústico. Pero este arranque será tan sólo un espejismo, la calma que precede a la tormenta, ya que no tardará en desatarse una tormenta apocalíptica de manos de unos riffs devastadores e incendiarios que se convertirán en el vehículo perfecto para unos delirantes alaridos que nos acaben abocando sobre unos desarrollos supersónicos y de esencia diabólica. En definitiva, una pieza incendiaria, con tintes apocalípticos, pero que conserva ese toque “pegadizo” que la convierte en terriblemente adictiva. Como remarqué anteriormente, dentro de este primer largo del combo brasileño nos encontramos una atractiva amalgama que aúna  thrash, death y algo de black metal old school, y la prueba palpable la encontramos en trallazos seminales como “Blair”, un ataque certero y directo a la yugular que servirá para noquear a los headbangers más experimentados.


El imparable asedio de los brasileños no se detendrá, ya que la batería de Hellkrätus llegará a ponerse al límite durante los compases iniciales de “Serpent Doom”, para dejar que sus riffs sostenidos, -deudores del heavy metal tradicional-, sean los encargados de catapultarnos hacia unas estrofas adrenalíticas, hirientes, demoníacas, cargadas de actitud y mala leche que harán que todo acabe ardiendo en el infierno gracias al rollo terrorífico que imprimen sus guitarras dobladas. Absolutamente delirante, así es como suenan las timbas que se encargarán de flanquearnos el paso  hacia el envenenado y subversivo  “Apocalypse”, que por derecho d propio se acabará convirtiendo en uno de los puntos culminantes del primer largo  de los de  Minas Gerais.


Algo similar, en cuanto a sonido y composición se refiere, podemos apuntar al hablar de “Evil”, aunque en este quinto corte el registro de Yan Nielsen sonará incluso más cavernoso y desesperado para acabar de redondear una composición que en algunos momentos, -por su ritmo machacón  y lo marcada de su estructura-, puede llegar a recordarte a los mismísimos Venom. Tras lo anteriormente expuesto no creo que sea una sorpresa que el inicio a base de redobles apocalípticos de “Inferno”, tenga reminiscencias de otros clásicos de la N.W.O.B.H.M., como son Diamond Head, aunque el tema en cuestión tenga más que ver con unos primerísimos Slayer, conducido por unos riffs absolutamente aniquiladores y un estribillo rotundo e implacable, todo ello propulsado  por un ritmo vertiginoso que volverá a poner a prueba, una vez más, tus cervicales.


Lejos de amainar su particular vendaval Speedkiller se mostrarán  absolutamente despiadados  durante “Blood Worship”, y es que aunque rebajen ligeramente el nivel de revoluciones durante las estrofas, será durante los desarrollos solistas cuando la banda, y especialmente su frontman Yan Nielsen, se encargue de dejar patente, -aunque puede resultar extraño-, su decidida y particular apuesta por la melodía. Su despiadada y furibunda sección rítmica será la que se encargue de impulsar “Invoke The Lord”, con pocas florituras y en la que el trío se dedica, -en sus menos de tres minutos de duración-, a no dejar títere con cabeza, para ratificar  que la velocidad incendiaria no está reñida con dejar espacio a algunos desarrollos más melódicos.


Varias han sido las ocasiones en los párrafos anteriores en los que un servidor ha tratado de dejar plasmado que el trío brasileño pese a ser devoto de las sonoridades más extremas y volátiles, también es deudor del clasicismo metalero, y aunque esto pueda sonar extraño, no lo es en absoluto, y más si tenemos en cuenta que estamos hablando de una banda que seguramente habrá devorado de forma compulsiva las obras clásicas de Venom, Celtic Frost y Motörhead, y la prueba palpable la encontramos en fogonazos como el que se encarga de cerrar el plástico “Black Blitzkrieg”.


Tras escuchar detenidamente este apabullante debut de Speedkiller, no me cabe la menor duda de que el joven trío brasileño ha dado rienda suelta a sus inquietudes musicales teniendo un ojo puesto  en el  pasado, aunque también han sabido aprovechar las nuevas tecnologías para conseguir  que su propuesta suene bastante más limpia, atractiva y, hasta cierto punto, accesible que la de sus indiscutibles referentes. En fin, me reafirmo: metal abrasivo, incendiario y con un delirante aroma a azufre y con mucho guiño al pasado, por supuesto, es lo que nos brindan Speedkiller en este trabajo que lleva por descriptivo título “Inferno”.




DISCOGRÁFICA:HELLDPROD RECORDS


Lista de Temas:


1. The Birth of the Immortal Evil

2. Blair

3. Serpent Doom

4. Apocalypse

5. Evil

6. Inferno

7. Blood Worship

8. Invoke the Lord

9. Black Blitzkrieg





No hay comentarios:

Publicar un comentario